Hoy, me gustaría compartir con vosotros este pequeño texto que escribí no hace mucho acerca del nacimiento del Universo y de los planetas, así como de los sucesos que acontecieron que dieron lugar a la vida.
Espero que os guste.
Todo era oscuro.
Todo
era silencio.
La
materia…Era un punto de densidad que no tenía fin. Y, entonces, tuvo lugar un
gran estallido. Una explosión que nunca más volvió a repetirse. La materia
había explotado. Una gran bola de luz lo iluminó todo. Se expandió la materia
por todas partes. Y aquella expansión dio origen al Universo. Así se creó. De
una explosión gigantesca de materia. El Universo…Ocurrió hace millones de años.
Pero su origen sigue fascinándonos.
La
temperatura había subido mucho. El calor hizo una parte. La otra parte la hizo
la densidad. Aquellos dos factores fueron determinantes cuando se fusionaron
partículas subatómicas en los elementos químicos.
Pasaron
algunos segundos desde que acabó la explosión. Las partículas de materia
empezaron a alejarse las unas de las otras. Se extienden por todas partes. Ya
no está oscuro. Ya no hay silencio. La materia está formada por las partículas
más elementales. Electrones, neutrinos, fotones, etc.
Es
el origen de algo nuevo. Algo que está empezando a tomar forma. Algo que
todavía sigue en constante cambio a día de hoy. Esta historia, de empezar en
algún lugar, empezaría aquí. En el Universo…En el origen de todo…Porque hay que
ir al origen para contar una historia. Porque el origen del Universo es el
origen de todas las historias. O quizás soy una loca romántica. Pero me gusta
empezar a contar mis historias desde el principio de todo.
El helio y el hidrógeno fueron los
primeros materiales en aparecer a partir del Big-Bang, nombre con el que se
conoce a aquella enorme explosión. La densidad era elevada. Ello ayudó a que la
materia se expandiera con más rapidez. Todo estaba a favor. El helio y el
hidrógeno se expandieron. Al mismo tiempo, se enfriaron. Se condensaron. Dieron
origen a las estrellas y a las galaxias.
El
proceso que viene a continuación es más complejo. Tardó más tiempo en
completarse.
La
radiación residual de la explosión siguió enfriándose hasta alcanzar los -270 ºC .
No
se sabe a día de hoy lo que hará el Universo. ¿Se contraerá? ¿Seguirá
expandiéndose?
El
Sol tuvo su origen hace 4.650 millones de años. Se formó gracias a las nubes de
polvo y de gas que contenían residuos de anteriores estrellas. Era un gas
metalizado. Gracias a él, de su disco circumestelar nacieron los cometas, los asteroides y los
planetas.
El
Universo sigue formándose. Ya ha nacido una nueva estrella. Es enorme y será
conocida por el nombre de Sol.
El
Sol sigue siendo la estrella que nos da luz. Y seguirá así hasta que muera.
Pero eso no va a pasar hasta dentro de 5.500 de años.
Nuestro
planeta, La Tierra ,
nunca tuvo el mismo aspecto. Hace cientos de millones de años, sólo había un
único continente y el mar lo rodeaba.
Esto
ocurrió hace millones de años. Cuando todavía no había vida. La Tierra era una bola inmensa
de rocas y metales formados.
La
temperatura de La Tierra
era tan alta que durante millones de años los metales y minerales permanecieron
en estado líquido. Poco a poco, la superficie se fue enfriando.
A
lo largo de millones de años, las placas se movían constantemente (y todavía se
mueven) y fueron separando aquel vasto continente llamado Pangea, que vio nacer
a los dinosaurios. Nacieron dos nuevos continentes. Laurasia y Gondwana.
Los
dinosaurios aparecen en el Triásico. A principios del Jurásico, Laurasia y
Gondwana siguen separándose. Una avanzaba hacia el Norte y se convertiría en lo
que hoy conocemos como Asia y Europa. En aquella época, estaban unidas a lo que
hoy es América del Norte. La otra avanzaba hacia el Sur y se convertiría en lo
que hoy conocemos como África y América del Sur.
En
el periodo Cretácico, aparecieron en el mar los grandes océanos. Entre ellos,
estaba el océano Atlántico. La distancia entre Laurasia y Gondwana seguía
aumentando.
Hace
millones de años, la vida hizo acto de presencia en nuestro planeta. Fue
gracias a la estructura más simple jamás habida. La célula. Nosotros, los seres
humanos, nacemos de una célula. Y nuestro origen está en esa simple célula.
Nacieron
hace 3.000 millones de años. Eran formas de vida unicelulares muy simples.
Había bacterias y unas algas llamadas cianofíceas.
Y
la vida llegó a los mares. Esto ocurrió hace 600 millones de años. Había
medusas, gusanos marinos y un crustáceo llamado braquiópodo. También aparecieron
los trilobites, seres marinos de cuerpo rígido formado por secciones articulada
que les permitía moverse. Los trilobites tenían unas patas similares a las
patas de las gambas.
Hace
410 millones de años aparecieron las primeras plantas, que no tenían hojas ni
flores y medían menos de cinco centímetros. Vivían en terrenos pantanosos.
Aparecieron los primeros insectos, como los escorpiones, que se alimentaban de
miriápodos, otros insectos que se alimentaban de las plantas.
Hace
390 millones de años, los mares se llenan de peces, que fueron los primeros
animales que tenían espina dorsal. Un pez que podía arrastrarse por el fondo
apoyado en sus aletas tomó una decisión crucial. Apoyado en sus aletas
delanteras, salió del agua y se quedó a vivir en tierra firme. Había dos tipos
de peces. Los peces que tenían un esqueleto cartilaginoso y los peces que
tenían un esqueleto óseo.
Los
anfibios aparecieron hace 370 millones de años. Evolucionaron a partir de aquel
pez que decidió quedarse a vivir en la superficie. Los anfibios podían vivir
tanto en la tierra firme como en el agua, donde ponían sus huevos. Se
alimentaban de insectos, como ahora.
El
tiempo seguía pasando.
Otros
animales hicieron acto de presencia.
Eran
los reptiles. Aparecieron hace 310 millones de años. Llegaron a ser más
numerosos que los anfibios. Se dice que un grupo de reptiles pudo ser el
antecesor de los mamíferos. ¿Sería esto verdad? No se sabe. En el grupo de los
reptiles nos encontramos con los lagartos, que hicieron su aparición hace 250
millones de años. Vivían en lugares secos, rocosos y montañosos.
Aparecieron
las selvas. Y eran inmensas. Más adelante, los homínidos vivirían en ellas.
Pero esto no nos atañe. Por el momento.
Los
insectos voladores, como la libélula, aparecieron en esta época. Antes, los
insectos estaban en el suelo. Eran los insectos más grandes jamás habidos.
Podían medir 70
centímetros .
Hace
245 millones de años, aparecieron los antepasados de los dinosaurios, los
reptiles arcosaurios.
Hace
220 millones de años, los dinosaurios dominaron el planeta Tierra. Los reptiles
ocupaban toda la faz de La
Tierra y algunos, incluso, habían regresado al mar, como los
ictosaurios y los plesiosaurios.
Otros
permanecieron en tierra. Fue entonces cuando aparecieron los dinosaurios. No
tardaron, como he dicho antes, en dominar la Tierra. Se dividían en dos
grupos. Un grupo tenía los huesos de las caderas parecidos a los de los
actuales lagartos. Se les conocía con el nombre de saurísquidos. El otro grupo tenía los huesos de las caderas
parecidos a los huesos de las actuales aves y se les conocía con el nombre de ornotísquidos.
Los
primeros dinosaurios eran animales más bien parecidos a los lagartos, pero que
caminaban sobre sus patas posteriores. Tenían largas colas que les servían para
hacer contrapeso con la parte delante de su cuerpo. Las patas delanteras eran
pequeñas y las utilizaban para arrancar o desgarrar, dependiendo del tipo de
dinosaurio, su comida. Corrían con más rapidez los animales que caminaban sobre
sus dos patas, lo cual les permitía atrapar a su presa, si eran carnívoros, o
huir de sus perseguidores, si eran herbívoros.
Algunos
de los dinosaurios saurísquidos eran abundantes en todo el planeta hasta que
apareció hace 100 millones de años el tiranosaurio rex. Medía 15 metros de altura. Su
cabeza medía 180
centímetros . Estaba armado con dientes de 15 centímetros .
Pesaba hasta 12 toneladas
El
tiranosaurio y otros dinosaurios como él eran los mayores depredadores que
jamás han existido sobre la faz de La Tierra. Algunos dinosaurios
saurísquidos eran herbívoros y, por lo general, solían ser más grandes que los
carnívoros. Llegaban a alcanzar tal tamaño que tenían que caminar a cuatro
patas. Tenían que apoyarse en el suelo para poder andar. Tenían las patas muy
gruesas.
Uno
de ellos era el diplodocus. Tenía un cuello largo y delgado, con una cabeza
pequeña en su extremo. La cola era también larga y delgada. Su cuerpo era
voluminoso. Y sus patas eran gruesas. Medía 27 metros . Era el animal
más largo que jamás ha existido en este planeta.
Un
dinosaurio parecido a él era el brontosaurio. No era tan largo como el
diplodocus. Pero era más grueso y más pesado que él. Podía pesar hasta unas 30
toneladas.
Pero
no era más pesado que el braquiosaurio. Tenía un cuello largo y una cola corta.
Era muy corpulento. Pesaba hasta más de 50 toneladas. Ello le convierte en el
animal más pesado que jamás ha existido.
Los
dinosaurios fueron los amos de nuestro planeta durante millones de años. En la
actualidad, se ha sabido que ha habido dinosaurios en todos los continentes.
Hasta en La Antártida.
Desaparecerían
millones de años después. No había hierba en aquella época. Tras la
desaparición de los dinosaurios, fueron pocas las plantas que sobrevivieron a
ellos.
Casi al mismo tiempo que aparecían los
dinosaurios, también aparecían los cocodrilos.
Las
cucarachas hicieron acto de presencia en nuestro planeta hace 30 millones de
años.
Las
primeras especies de búhos aparecieron hace 84 millones de años.
Tras
el Jurásico, empezó el período Cretácico. Un período que se caracteriza por ser
más cálido y en el que el nivel de los mares creció hasta cubrir gran parte de La Tierra. Los continentes
chocaban entre sí, formando elevadas cadenas montañosas.
Tras
la desaparición de los dinosaurios, la vida no se acabó en nuestro planeta. No
desaparecieron tampoco los reptiles. Los caimanes y los cocodrilos, de alguna
forma, han pervivido hasta nuestros días.
Las
tortugas son unos reptiles que aparecieron en nuestro planeta mucho antes que
los dinosaurios. Junto con las serpientes y los lagartos, las tortugas
sobrevivieron al cataclismo que acabó con los dinosaurios y llegaron hasta
nuestros días.
Además,
algunos reptiles evolucionaron a lo largo de millones de años de tal modo que
dejaron de ser reptiles.
Hace unos 150 millones
de años, las escamas de algunos reptiles más pequeños empezaron a levantarse de
su piel. Poco a poco, se fueron tornando en plumas. Se dice que ése fue el
origen de las primeras aves que hubo en nuestro planeta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario